¿Qué es un webhook?
Un webhook es un mecanismo que permite que dos aplicaciones o sistemas se comuniquen entre sí en tiempo real. Es una forma de que una aplicación proporcione actualizaciones o notificaciones automáticas a otra aplicación cada vez que ocurre un evento o desencadenante específico.
En el contexto del desarrollo web, un webhook generalmente se implementa como una devolución de llamada HTTP, donde una aplicación envía una solicitud POST a un punto final URL específico (proporcionado por la aplicación receptora) cada vez que ocurre un evento en particular. Luego, la aplicación receptora procesa la solicitud entrante y realiza las acciones necesarias en función de los datos proporcionados.
¿Para qué se utilizan los webhooks?
Los webhooks se utilizan comúnmente en varios escenarios, como por ejemplo:
Notificaciones: los webhooks permiten que las aplicaciones envíen notificaciones en tiempo real a otros sistemas o servicios. Por ejemplo, una aplicación de mensajería puede utilizar webhooks para notificar a sistemas externos sobre nuevos mensajes o actualizaciones.
Integraciones: Los webhooks facilitan la integración de diferentes aplicaciones o servicios. Por ejemplo, una plataforma de comercio electrónico podría utilizar webhooks para informar a un servicio de envío sobre nuevos pedidos para su procesamiento inmediato.
Automatización: los webhooks pueden desencadenar acciones o flujos de trabajo automatizados. Por ejemplo, una herramienta de gestión de proyectos puede utilizar webhooks para crear tareas automáticamente o actualizar los estados del proyecto en función de eventos en sistemas externos.
Sincronización de datos: los webhooks se pueden utilizar para mantener sincronizados varios sistemas o bases de datos. Cuando los datos cambian en una aplicación, un webhook puede notificar a otros sistemas para que actualicen sus registros en consecuencia.
Los webhooks proporcionan una forma flexible y eficiente para que las aplicaciones se comuniquen y sincronicen información en tiempo real, lo que permite flujos de trabajo optimizados, tiempos de respuesta más rápidos y una mejor integración del sistema.
¿Cómo funcionan los webhooks?
Los webhooks funcionan estableciendo un canal de comunicación entre dos aplicaciones o sistemas. El proceso normalmente implica los siguientes pasos:
Configuración: la aplicación que recibirá el webhook (denominada “escucha” o “punto final del webhook”) proporciona una URL o punto final único a la aplicación de envío (denominada “remitente” o “fuente del webhook”). Esta URL actúa como destino para que el remitente envíe solicitudes HTTP POST que contengan datos relevantes.
Evento o desencadenador: la aplicación emisora define un evento o desencadenador específico que iniciará el webhook. Este evento podría ser cualquier cosa, desde la realización de un nuevo pedido hasta la suscripción de un usuario a un servicio. La aplicación del remitente realiza un seguimiento de estos eventos y determina cuándo enviar notificaciones de webhook.
Notificación: cuando ocurre el evento predefinido, la aplicación emisora genera una carga útil que contiene datos relevantes relacionados con el evento. La carga útil podría incluir información como tipo de evento, cambios de datos o contexto adicional. Luego, el remitente construye una solicitud HTTP POST con la carga útil y la envía a la URL del punto final del webhook proporcionada por el oyente.
Recepción y procesamiento: la aplicación de escucha recibe la solicitud HTTP POST que contiene la carga útil en la URL del punto final del webhook. Procesa la solicitud entrante, extrae los datos de la carga útil y realiza las acciones u operaciones necesarias en función de la información recibida. Esto podría incluir actualizar una base de datos, activar un flujo de trabajo, enviar notificaciones o cualquier otro comportamiento deseado.
Respuesta: después de que la aplicación de escucha procesa la carga útil, normalmente envía una confirmación o respuesta a la aplicación del remitente. Esta respuesta puede confirmar la recepción y el procesamiento exitosos del webhook, lo que permite al remitente saber que la notificación se recibió y manejó correctamente.
Los webhooks proporcionan un mecanismo de comunicación en tiempo real entre aplicaciones, lo que permite una integración y automatización perfectas. Eliminan la necesidad de realizar sondeos constantes o sincronización manual de datos, ya que la aplicación del remitente notifica proactivamente al oyente cada vez que ocurre un evento relevante. Esto permite actualizaciones de datos más rápidas, una mejor coordinación del sistema y flujos de trabajo más eficientes.
¿Cuál es la diferencia entre API y webhook?
Las API generalmente se basan en solicitudes, lo que permite a los clientes interactuar con las aplicaciones del servidor según sea necesario, mientras que los webhooks están controlados por eventos, lo que permite notificaciones y actualizaciones en tiempo real desde las aplicaciones emisoras a las aplicaciones receptoras sin necesidad de sondeo.